domingo, 25 de diciembre de 2011
EL GLADIADOR DE LAS PALABRAS
domingo, 9 de octubre de 2011
Movimientos Sociales
Vivimos sumidos en una crisis importante desde hace varios años; mientras que la economía oscila con tendencia a la baja, la sociedad desesperada mira esperanzada a una fecha simbólica que ya hace 36 años marcó el inicio del fin de una época oscura y vergonzosa para todos los españoles. Sin embargo mi espíritu optimista decide escapar cuando se habla de esa fecha, pienso que en esta ocasión los cambios no serán tan halagüeños. Cuando oigo las propuestas para sacar a este país de su ruinosa situación por parte del principal candidato a obtener la presidencia del Gobierno, solo veo soluciones genéricas y poco concretas, mientras que las propuestas del candidato del partido que ahora nos gobierna son propuestas más rotundas y precisas. Ahora me pregunto, ¿se guarda los populares las medidas a adoptar por ser poco populistas o es que sencillamente no tienen ninguna medida concreta? ¿son creíbles las propuestas socialistas? Y si fueran ciertas, ¿por qué no las han tomado durante su periodo de Gobierno?
Los partidos minoritarios, ni siquiera tienen voz en los medios estatales y son los nacionalistas catalanes los que más lejos mandan sus mensajes, posiblemente por ser los más preparados políticamente para una sociedad donde cada vez más mediocres ocupan cargos de responsabilidad política con el único mérito contraído de ser amigos de un irresponsable. Mientras, se dicta una nueva Ley que obliga a que los partidos políticos sin representación parlamentaria estén obligados a presentar un número concreto de avales previos; como si se tratase de unos candidatos a la presidencia del R.Madrid o F.C. Barcelona; ¿acaso PSOE y PP están legitimados a pedir avales a otros partidos políticos después de los constantes escándalos de corrupción y la nefasta gestión que han demostrado en la política de este país en los últimos años?.
Mientras tanto los movimientos sociales, ejemplares en sus comienzos al mismo tiempo que espontáneos, poco a poco se van fragmentando en diferentes ramas, Los Indignados, el 15 M, Democracia Real, etc…, preludiando un final en el que muchos de sus miembros, ávidos de unos cambios que no se producirán, terminen abandonando desencantados o tal vez, formando parte de alguna formación política.
Me pregunto por qué estos movimientos, de objetivos similares, no se unen en busca de unos objetivos comunes, se organicen y conformen, en una Plataforma con su órgano directivo, que intenten cambiar todo lo que denuncian de manera contundente, pero desde una estructura organizada. Esto me plantea una nueva cuestión, ¿se tiene miedo? ¿a qué? ¿por qué estos movimientos valientes en su origen y su multitud se vuelven tímidos y temerosos a la hora de dar un paso contundente y efectivo? ¿de verdad se cree que manteniendo concentraciones pidiendo que se cambien las cosas se pueden lograr que cambien? y ¿por qué no se hacen propuestas de cómo ejecutar esos cambios a las instituciones públicas?
Entiendo el temor, en este país se ha vivido demasiadas veces como los rebeldes, los que han luchado por los derechos civiles, han terminado abducidos por un poder que le ha ofrecido bienes materiales o salida laboral a cambio de su silencio o el cambio de discurso. Si esto sucediera supondría una bofetada moral para muchos de los que se han pasado los días con incomodidades en las plazas de toda España, el tener un órgano directivo que pueda ser objeto de compra y sobornos por parte de la clase política mandataria; pero para evitar eso está el pueblo y está todos los que han hecho la sentada.
viernes, 10 de junio de 2011
LA HORA DE LOS VALIENTES
Durante meses las calles de nuestras localidades se llenaron de fotografías de personas pidiendo un voto para mejorar las estructuras económicas, físicas, sociales y culturales de los diferentes municipios de la localidad. Todos ellos se autocalificaban como los “más preparados para sacar a nuestro pueblo de la crisis” y lograban exaltar entre vítores a sus simpatizantes cuando cerraban sus mitin con un “¡¡VAMOS A GANAR!!.... Meses después, sólo unos ganaron y otros perdieron, dando lugar a la hora de los valientes.
Horas antes de las diferentes tomas de posesión de los distintos ediles a los Consistorios correspondientes vemos como algunos de los electos, efectivamente sólo estaban preparados para gobernar y su ego o su cobardía les hace poner pies en polvorosa renunciando a sus respectivas actas de concejal y aseverando a aquellos que llenan las plazas de nuestra ciudad indignados ante la estructura política económica instaurada por el capitalismo. Y es que los que hoy no aceptan la derrota y huyen del compromiso demuestran que tampoco hubiesen sido una buena opción política, pues ya empiezan con mentiras desde el primer día. No estaban preparados para gobernar, como rezaban en sus proclamas electorales, estaban preparados para las loas, los abrazos y las felicitaciones, sólo estaban preparados para ser los primeros y ese quien sólo sabe navegar en aguas en calma no son buenos marineros.
Cuando esta huida se ve en un grupo que abandera la defensa de la clase obrera y de los que menos tienen, aún es más indignante. Hubo una vez un candidato por este partido, que fue el más valorado durante años, pero el municipio nunca le dio la opción de gobernar, dejó su salud en el intento de mejorar una localidad que no le vio nacer pero que fue y será su pueblo siempre. Tras el, muchos cobardes abandonaron el barco, dejando a la deriva de un Gobierno que se asentó en su poder como un niño mimado por sus padres. Solo sobrevivió uno de los 5 opositores, un superviviente en el sentido más literal pero que sólo aportaba su voto en los salones de pleno.
En las pasada legislatura Izquierda Unida buscó a un candidato carismático, un luchador durante años y artífice de excepción de que no se instalara el parque eólico marítimo en las costas jandeñas. ¿Quién me iba a decir que también te irías?. Jamás pensé que alguien que había sido un valiente toda su vida en su madurez se volviese cobarde.
No me queda más que preguntar a los desertores de IU que piensan que pasará con su partido ¿con qué cara mirarán a quien tanto luchó por un grupo minoritario llevándolo al segundo lugar de las preferencias electorales barbateñas? ¿Qué explicación darán a los miles de votantes que en las dos últimas legislaturas depositaron su confianza en IU? Y finalmente a la ejecutiva provincial, ¿qué criterios han utilizado para seleccionar a un grupo de cobardes para que representaran al colectivo político que en la historia Contemporánea fueron siempre los más valientes?.
El próximo sábado será la hora de los valientes pero entre ellos faltará la voz de los cobardes.